Os presento a Angus Barbieri, quien nació en un pequeño pueblo de Escocia llamado Tayport en el año 1939. No se conoce mucho sobre su infancia pero por lo que contó en posteriores entrevistas siempre había sido un niño gordito, le encantaba comer dulces y odiaba hacer deporte y caminar. Con la edad siguió engordando debido a sus malos hábitos hasta que llegó un punto en el que tantos kilos no le permitían llevar a cabo una vida normal ya que necesitaba ayuda para realizar las tareas cotidianas.
A los 27 años (en 1966) un joven Angus se presentó en la Dundee Royal Enfermery, importante hospital escocés que se encontraba a 15 minutos en coche de su casa. En aquel momento su peso rondaba los 207 kilos.
Los médicos le propusieron hacer un pequeño ayuno de unos días para comenzar con la pérdida de peso, desde el principio Angus dijo que haría todo lo posible para conseguir su peso ideal y le pareció muy buena idea comenzar con un pequeño ayuno.
En aquella época era muy común recurrir a este tipo de estrategias para la pérdida de peso, debido a su eficacia y seguridad. Muchos de los estudios a los que hoy se refieren los fanáticos del ayuno vienen de estas décadas.
Los primeros días fueron muy bien, tal y como esperaban los médicos. Pasados estos primeros días le recomendaron a Angus que no lo alargara demasiado, si bien los ayunos de corta duración (menos de 40 días) mostraban resultados muy buenos, ayunos más prolongados en el tiempo se asociaban con cierto aumento del riesgo de ciertos problemas de salud.
Como ya os he spoileado en el título intuiréis que Angus no quiso para el ayuno, más bien al contrario, decidió continuar hasta que consiguiera su peso ideal: 81kg. Debido a su cabezonería los médicos aceptaron con la condición de que Angus se realizara chequeos periódicos para evaluar muy bien su estado de salud y prometiera acabar con el experimento en caso de que apareciera algún tipo de contraindicación. Se le realizaron pruebas de sangre, orina 24h y heces durante todo el tiempo que duró el ayuno. Por otro lado se le suministraban a diario multivitamínicos y electrolitos, además tenía permitido beber ad libitum bebidas son calorías, como agua con gas o tés.
Angus admite que durante las primeras semanas el hambre llegó a ser enorme en algunos momentos pero a partir del primer mes desapareció durante todo el resto del ayuno. Los médicos no vieron motivos para detener a Angus porque sus analíticas nunca dieron problemas y el se encontraba perfectamente.
El día 11 de julio de 1967 (382 días después) Angus alcanzó su peso soñado: 81kg. Os incluyo una foto en la que aparece ingiriendo su primera comida con calorías en más de un año: un huevo duro con tostadas y mantequilla:
Después de su hazaña Angus se mudó a Warwick donde tuvo 2 hijos. En el año 1971 el Libro Guiness de los Records reconoció su ayuno como el más largo nunca registrado por un ser humano. Su peso se estabilizó en 85kg años más tarde y nunca recuperó el resto del peso perdido. Tuvo una buena vida con su familia hasta que murió el 7 de septiembre de 1990 a los 51 años. Según he leído murió de causas naturales pero no he encontrado más información sobre el tema.
Os adjunto finalmente un paper de 1973 en el que se explica de forma detallada todo lo referente al ayuno de Angus, incluyendo sus analíticas y suplementos:
Espero que os haya parecido interesante, la próxima vez que alguien os diga que el desayuno es la comida más importante del día y que no podéis saltároslo acordaos del bueno de Angus